Tras los incidentes del domingo, la Policía prevé generalizar el derecho de admisión a los estadios, medida que actualmente se aplica solamente en los partidos clásicos. La Jefatura analiza los videos de los incidentes en el estadio de Cerro.

El jefe de Policía de Montevideo, Walder Ferreira, dijo que en el partido del domingo entre Cerro y Peñarol, catalogado como de "alto riesgo" (motivo por el cual se estableció un operativo de seguridad especial con 200 efectivos) no se aplicó el derecho de admisión, por lo que ingresó todo el que quiso.

"Ayer (por el domingo) no evitamos que nadie ingresara" al Estadio Luis Tróccoli, indicó Ferreira a El País.

La Policía, según un protocolo de actuación para eventos deportivos, tiene la potestad de prohibir el ingreso a los estadios de personas que hayan participado en episodios violentos, o que hayan sido procesadas.

El jefe de Policía reconoció que la utilización de ese mecanismo "recién comienza" y su implementación "lleva su tiempo", porque hasta el momento era aplicado "básicamente" para los clásicos entre Peñarol y Nacional.

Sin embargo, Ferreira anunció que a partir de los hechos de violencia del domingo, la intención de las autoridades es aplicar el derecho de admisión en "todo partido donde exista la certeza de que habrá elementos que generen disturbios".

Ferreira señaló, incluso, que "es probable" que el derecho de admisión sea aplicado el próximo fin de semana en el partido entre Nacional y Cerro, en el Parque Central.

Por otro lado, el jerarca policial dijo que la Jefatura está analizando los registros de las cámaras de seguridad del Tróccoli, con el objetivo de identificar a los hinchas que provocaron los disturbios.

¿RESPONSABLES?. Los incidentes tras el partido entre Cerro y Peñarol, y las agresiones que sufrieron hinchas de Defensor Sporting de parte de parciales de Danubio tras los encuentros que se disputaron ante River y Bella Vista en el Prado, motivaron ayer un cruce de acusaciones entre las autoridades del fútbol y las jerarquías del Ministerio del Interior.

Las diferencias surgieron a raíz de lo ocurrido en el Prado. Al respecto, el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, dijo que son los clubes quienes "organizan el espectáculo", y por eso debieron prever la cercanía de los estadios en los que jugarían Danubio y Defensor Sp. "Los que hicieron un partido cercano del otro fueron los clubes", soltó Bonomi.

Desde los clubes implicados se criticó con dureza la actuación policial y, en particular, al inspector Luis Mendoza, responsable de la seguridad en los partidos.

El jefe de Policía, Walder Ferreira, defendió el trabajo de Mendoza, y en el mismo sentido que Bonomi se preguntó: "¿Quién fija los partidos? ¿Mendoza? Quizá no estuvimos atentos a cosas que pasaron antes del partido, pero también lo tendrían que haber visto las autoridades del fútbol", dijo.

Ante las críticas, las autoridades policiales evaluaron relevar a Mendoza de su cargo. Sin embargo, Ferreira dijo que "el tema se analizó y no se creyó conveniente removerlo". De todos modos, el jefe Policía de Montevideo, al ser consultado por El País, prefirió no atribuir responsabilidades.

Raúl Giuria, de la AUF, respondió que la seguridad de los partidos "claramente depende de la Policía y no de la AUF".

En tanto, el director nacional de Deporte del Ministerio de Turismo y Deporte, Ernesto Irurueta, dijo a El País que si bien existe una Comisión de Prevención, Control y Erradicación de la Violencia en el Deporte, es el Ministerio del Interior quien debe ocuparse de la seguridad "en cada uno de los eventos".

Mal gestado. "Le avisamos con antelación al inspector Mendoza lo que iba a pasar. Fernando Sobral (ex presidente de Defensor Sp. y actual Neutral de la AUF) habló expresamente y le dijo que jugábamos a tres cuadras y que iba a haber problemas, pero no hicieron nada, como siempre", dijo Dante Prato, titular de la institución violeta, minutos después de los disturbios.

Raúl Giuria, integrante de la Mesa Ejecutiva de la AUF explicó a El País que la fecha del campeonato "fue armada antes de la semana de Carnaval" y que el documento con el calendario y los cruces fue evaluado por la Comisión de Seguridad "que no presentó objeciones".

Como si esto fuera poco, Giuria relató también que "en la semana" recibió el llamado de Sobral, que le advirtió sobre las amenazas que estaban circulando en internet entre parciales de Danubio y de Defensor.

"De inmediato llamé al inspector Mendoza y le avisé", dijo Giuria. Según el directivo, el responsable de la seguridad le respondió: "Yo me encargo. Vamos a ver si llevamos algún vallado de Radio Patrulla".

Sin embargo, Raúl Rodríguez (Presidente de la Mesa Ejecutiva de Primera División, ex presidente de Racing y ex integrante del Consejo Ejecutivo de la AUF), afirmó a El País que "La Mesa Ejecutiva elevó el proyecto de fecha dos semanas antes, como siempre. Lo envía al Colegio de Árbitros, a CAFO, a la Comisión de Seguridad, a Tenfield y a los clubes", dijo.

"Es más; acá tengo el mail que le mandamos al mismo Dante Prato con el proyecto de fecha el 2 de marzo. Lo hicimos antes de Carnaval y nadie se quejó", afirmó.

Rodríguez agregó: "A mí, presidente de la Mesa nadie me advirtió de que podía haber problemas entre las hinchadas de Danubio y Defensor. Ni Prato, ni nadie. No hubo una nota, ni una llamada, nada".

Como ejemplo, contó que cuando Tacuarembó no pudo jugar con River Plate porque no había hoteles disponible por la Patria Gaucha "nos avisaron y fijamos el partido para el lunes. Hubo que reestructurar la fecha y lo hicimos", dijo. Cuando alguien tiene un inconveniente lo plantea, para eso está la Mesa.

En Cerro, las decisiones las toma la asamblea de socios. El presidente del club, Carlos Cairo, era partidario de que el partido se disputara en el Estadio Centenario, tanto por la seguridad como por el elemento económico: siendo local en el Centenario Cerro se beneficiaría con más entradas vendidas y menos efectivos policiales. Sin embargo, los socios definieron que el partido debía jugarse en el Tróccoli, y así se determinó. La Comisión de Seguridad dispuso un operativo especial pa-ra el partido, catalogado como de "alto riesgo", con 200 efectivos. El dispositivo fue costeado por Cerro, y algunas fuentes aseguraron que le salió más de US$ 10.000.

FUENTE: www.elpais.com.uy