Según las estadísticas del Ministerio del Interior, sólo el 17% de las rapiñas fueron cometidas contra comercios. Sin embargo han sido las más violentas: siete víctimas murieron y cinco delincuentes fueron abatidos.

"Señores, no tenemos ataques terroristas, no tenemos bandas de asaltantes de bancos, no tenemos bandas de narcotraficantes peleándose entre ellos (...) El problema nuestro es este (las rapiñas)". Así lo exponía el director de Seguridad de la Jefatura de Policía de Montevideo, Miguel Iraola, el 7 de octubre pasado en una conferencia para empresarios de la seguridad privada en el Radisson.

Los atracos cometidos contra comercios son, a estar por las estadísticas divulgadas el jueves por el Ministerio del Interior, los más problemáticos. La evolución de los índices muestra algunos datos dignos de interés: el 50% de esta modalidad delictiva es cometido contra transeúntes. Sin embargo las muertes ocurridas en el curso de atracos tuvieron lugar en comercios, que en términos generales representan el 17% de esta modalidad.

Sobre esta base, la Policía elaboró una cartilla de seguridad dirigida exclusivamente a comerciantes. La serie de recomendaciones -que van desde cómo comportarse en caso de ser víctima de un atraco a las medidas de prevención que pueden adoptarse- desestimula en general toda forma de enfrentamiento con los delincuentes y termina con una clara exhortación: "Las estadísticas nos dicen que todas las resistencias con resultado exitoso fueron pura suerte".

ANÁLISIS DEL RIESGO. El informe del Ministerio incluye una compilación de los casos que terminaron con personas muertas o lesionadas en el transcurso de una rapiña. Toma unos 20 casos registrados a lo largo de 2010 donde víctimas y victimarios resultaron con heridas letales o graves por disparos de armas de fuego.

El análisis, que es desarrollado por el propio inspector mayor Miguel Iraola, toma algunos de los casos que han tenido mayor repercusión en la opinión pública. El crimen del almacenero Mario Crespo (60), ocurrido el 24 de febrero pasado; el quiosquero Jorge Lemos (54), asesinado en su local de Malvín Norte el 18 de marzo; el administrador de taxis Jorge Newbery Campos (54), asesinado en un parking el 7 de julio; el empleado de una mensajería Javier Ferreira (33), asesinado en el local el 30 de agosto; el comerciante Fabricio Amarelle (23), muerto al perseguir a dos delincuentes. Y también refiere a aquellos casos en que los comerciantes respondieron a la irrupción armada, tal el caso del comerciante Jesús Dávila, que disparó y dio muerte a dos jóvenes, Lewis Texeira (31) y Jesús Rodrigo Cejas (20), quienes aseguró intentaron asaltarlo.

Entre las primeras conclusiones del análisis policial resalta la que apunta "(las) personas asaltadas que ensayaron alguna reacción emocional y terminaron muertos, existe una posibilidad teórica de que si no hubieran reaccionado, podrían haber salvado su vida".

Iraola también señala la disparidad de armas enfrentadas -como por ejemplo, armas de fuego contra armas blancas- como un factor desequilibrante en favor de comerciantes que repelieron un ataque. En este punto señala que tuvieron "éxito porque las armas de los delincuentes o bien eran de juguete o bien estaban descargadas, lo que les dio sin duda una ventaja decisiva".

Más adelante, tomando en cuenta sólo estos casos, el análisis del jefe policial llega a las conclusiones más significativas. "Un 30% falleció por reacción intempestiva y emocional. Un 15% tuvo éxito porque no tenían armas o estaban descargadas. Un 10% se enfrentó con éxito por enfrentar armas blancas a armas de fuego. Un 5% se enfrentó con éxito por su condición de policía".

"Concluimos que todas aquellas personas que intentaron reaccionar o bien fallecieron o si sobrevivieron tuvieron suerte, porque leídos los partes policiales, si las armas hubieran estado cargadas o hubieran sido verdaderas, los resultados hubieran sido otros, y tendríamos sin duda alguna un 45% de fallecimientos", apunta.

algunas claves. El informe oficial resaltó algunos datos significativos, entre ellos el ya señalado del 50% de las rapiñas tienen a transeúntes como víctimas. Otro de los datos que llama la atención es la nocturnidad de un alto porcentaje de estos casos: cuatro de cada 10 rapiñas se registra entre las 18 y las 24 horas.

Los montos de dinero robado revelan que el delincuente sale en busca de la oportunidad, no de grandes sumas: en el 56% fue por montos menores a los $ 2.000. De todos modos, en el 88% de los casos el botín no superó los $ 10.000 y solo en un 2,5% superó los $ 60.000.

En esta modalidad, más allá del aumento global del 28,27%, donde tuvo un incremento explosivo fue en las rapiñas contra ómnibus: un 76,05%.

Recomendaciones de la policía

PREVENCIÓN La cartilla de recomendaciones elaborada por la Policía de Montevideo contiene algunos consejos de sentido común, medidas sencillas y sugerencias algo polémicas, como la investigación de antecedentes de los empleados.

DINERO Mantener poca cantidad de dinero en caja y en cofres de seguridad.

SISTEMAS Cámaras de circuito cerrado, alarmas, vallado, sensores, puertas con sistemas de esclusas, cofres de seguridad con apertura retardada, teléfonos en las trastiendas o baños.

GESTIÓN Recomienda ser cuidadoso en la contratación de personal, y que el empleador conozca detalles de la vida personal del empleado.

MANEJO Para el manejo de dinero y valores recomiendan evitar salidas rutinarias para efectuar depósitos; no enviar a un solo empleado; no llevar el dinero en un solo lugar y con grandes sumas contratar a una empresa de transporte de caudales.

CRITERIOS Se pide al comerciante que dialogue con sus empleados y familiares acerca de cómo manejarse en caso de un atraco. Siempre mantener la calma.

ARMAS La Policía recomienda no usarlas, pero en caso de hacerlo pide que esté en regla, probada y con adecuada munición. Asimismo que se sepa utilizarla. La cartilla completa puede consultarse en la página web del diario: www.elpais.com.uy.

Detenido en el caso Amarelle va a juez

Uno de los implicados en la muerte del comerciante Fabricio Amarelle (23) fue detenido ayer por la Policía.

Según indicaron fuentes policiales a El País, un individuo apodado "El Papito", mayor de edad y con varios antecedentes penales, fue detenido por efectivos de la Comisaría 16ª que investigaban un atraco contra una estación de servicio en Punta de Rieles. Al indagarlo encontraron que el detenido posee varias semejanzas con uno de los dos buscados por el caso Amarelle, tales como tatuajes en cuello y manos. El detenido está ahora a disposición de la Justicia.

En tanto, anoche, alrededor de un centenar de personas marchó en Bella Italia en reclamo de justicia. La marcha partió desde Camino Maldonado y Venecia, donde ocurrió el atraco contra Amarelle, hasta José Belloni donde la tía del joven leyó una proclama.

 

FUENTE: www.elpais.com.uy