La US, dispuesta a "dialogar" una solución
Una alumna denuncia ante la Agencia de Protección de Datos a la US por no entregarle un examen que suspendió
Una alumna del Máster de Profesorado de ESO, FP y Enseñanza de Idiomas (MAES) de la Universidad de Sevilla (US) ha denunciado ante la Agencia Española de Protección de Datos a esta institución académica por no entregarle, tal y como había solicitado formalmente, toda la información sobre sus datos de carácter personal en relación al máster, entre ella, la copia de un examen de la asignatura 'Aprendizaje y Desarrollo de la Personalidad' que había suspendido con una calificación de un tres.

La petición de estos datos por parte de la alumna, según ha explicado la propia afectada a Europa Press, responde a que quiere comprobar la corrección a la que ha sido sometida dicha prueba (tipo test). La US la autorizó para acudir al Secretariado de Máster Universitario para poder visualizar 'in situ' todos los documentos requeridos y a que se llevase copia de todos los que se refirieran a su persona, pero no así de los que "afectasen a otros", como es el caso de los partes de asistencia a clase. No contenta con esta respuesta de la Hispalense, la estudiante decidió interponer esta denuncia ante la Agencia de Protección de Datos, de la que aún espera respuesta.

Pero el problema de esta chica se remonta a tiempo antes de la realización del examen. Pese a estar matriculada en la modalidad presencial del MAES, realizó el examen del máster con los alumnos de la modalidad no presencial porque el día previsto para la prueba tenía una citación judicial y la profesora que le impartía la citada asignatura consideró que lo más oportuno era que lo hiciera con los otros compañeros aunque, según la alumna, el temario era "distinto" al de la modalidad presencial, extremo éste que niega la US.

Con todo, según la versión de la afectada, la profesora se "comprometió delante de testigos" a otorgarle dos puntos adicionales por la asistencia y la participación continua a clase como alumna presencial, algo que finalmente no hizo, por lo que su calificación final ha sido la de suspenso.  

La alumna argumenta en su defensa que el Boletín Oficial de la Universidad de Sevilla (BOUS) recoge como criterios para la evaluación continua (la que le correspondería por estar matriculada en la modalidad presencial) "la participación en las clases lectivas, tanto teóricas como prácticas, incluida la asistencia y defensa de ponencias y trabajos en seminarios". Es por esto por lo que exige que se le otorguen dos puntos adicionales a tal efecto y se le sumen a los tres de la nota del examen, suficiente para aprobar la asignatura y, por tanto, el MAES.

Sin embargo, la Hispalense ha rechazado esta petición porque el criterio de los dos puntos adicionales es "sobre el aprobado o, en caso de suspenso, si alguien se queda a una pregunta o dos" del 70 por ciento mínimo de respuestas acertadas que exige un aprobado en este examen tipo test. Para la US, solo entonces se tendría en cuenta la asistencia y la participación a clase y esta alumna no cumple ninguno de estos dos requisitos.

La Comisión de Docencia del Departamento de Psicología Evolutiva y de Educación de la Hispalense --al que pertenece la profesora encargada de impartir la asignatura cuestionada-- asegura en un informe, al que ha tenido acceso Europa Press, que la alumna, de 30 cuestiones, "solo consiguió 14 preguntas correctas en el examen, por lo que, de acuerdo con el programa de la asignatura, no hubo lugar a tener en cuenta la asistencia". Para ello, hubiese tenido que contestar bien al menos 21 (70% del total).

La estudiante, sin embargo, alega que no ha podido ver su examen y que el Departamento ha actuado así "por corporativismo". La Universidad de Sevilla, por su parte, se defiende argumentando que, en todo momento, se ha mostrado colaborada con las peticiones de esta estudiante y que, "desde el primer momento en que llegó la primera reclamación", ha intentado "solucionar el asunto de la mejor manera posible".

Así lo ha explicado a Europa Press la directora del MAES, Ana María Montero, quien asegura que este caso es "totalmente excepcional" porque el índice de aprobados en el máster supera el 90 por ciento y que, aún así, la US nunca se ha opuesto "a nada". En esta línea conciliadora, Montero ha asegurado que la Universidad está "abierta" a "dialogar" con esta alumna para intentar encontrar una solución antes de que lleve el caso, tal y como ha advertido que hará, al Juzgado de lo Contencioso-Administrativo.

"Estamos abiertos a hablar, pero yo como directora del Máster no puedo decir a la profesora, ni que le vuelva a hacer el examen ni que la apruebe", insiste Montero.