La creciente inseguridad derivada de la crisis económica ha puesto en alerta a empresas y comunidades de vecinos en Galicia que tratan de protegerse a toda costa de robos y posibles hurtos. Las cámaras de videovigilancia son uno de los recursos más utilizados. La prueba es que en los últimos dos años estos sistemas de seguridad se han triplicado en la comunidad autónoma. Según los datos de la Agencia de Protección de Datos, en 2009 solo había instalados 1.634 de estos equipos, la mayoría privados (1.612). En la actualidad son ya 5.848 los ficheros dados de alta en este organismo, 5.785 correspondientes a particulares.

La razón de este incremento está en el aumento de la inseguridad ciudadana, en opinión de la Federación Galega de Comercio, uno de los sectores que más recurre a estos sistemas de videovigilancia.

Aunque los robos en establecimientos han descendido en Galicia el pasado año en relación a 2009, sí se han incrementado considerablemente los hurtos, desde comida en el supermercado a joyas u otros objetos de más valor.

Cuando su coste supera los 400 euros se considera delito. En la comunidad en 2010 se registraron 3.780 hurtos de este tipo, un 10,6% más que en 2009. Cuando el valor de lo sustraído es menor se considera falta, pero estos pequeños robos también van en aumento. Se incrementaron un 6% en un año hasta alcanzar los 17.681 y suponen una sangría importante para muchos establecimientos que tienen que sumar estas pérdidas al descenso de ventas por la caída del consumo.

Ante este panorama las empresas optan por instalar cámaras que vigilen tanto la entrada al establecimiento como el interior del local. Su puesta en funcionamiento ha de ser notificada a la Agencia de Protección de Datos. Según sus estadísticas, de los 5.848 equipos de videovigilancia instalados en Galicia, un total de 2.329 están ubicados en la provincia de A Coruña, donde hace dos años solo había 583. En Pontevedra hay 2.011, un 271% más que en 2009. Mientras, en Lugo solo constan 749 de estos sistemas y en Ourense 696.

No son solo las empresas gallegas las únicas que han disparado el uso de estos dispositivos. En España son más de 79.000 los locales que intentan protegerse frente a posibles robos mediante la instalación de cámaras. En 2009 solo había 21.721 equipos de videovigilancia. 

El comercio y la hostelería son los sectores que más están apostando por estos sistemas de seguridad.

FUENTE: www.farodevigo.es