Si tiene en agenda disfrutar de las Fiestas de la Calle San Sebastián, sepa que si lleva un bulto debe estar listo para que le registren sus cosas, que habrá cámaras de seguridad por diversos rincones, que podría tener a un policía sin uniforme cerca vigilando sus acciones y que puede ser olfateado por la Unidad Canina de la Policía.

El alcalde de San Juan, Jorge Santini, y el comisionado de seguridad de la Policía Municipal, Hilton Cordero, enumeraron las medidas de seguridad que se llevarán a cabo en esta fiesta de pueblo, que inicia hoy, jueves, y se extiende hasta el domingo. “Habrá ciertas restricciones a la hora de entrar al área de las Fiestas. No vamos a permitir que entren con bultos que contengan botellas de cristal ni bebidas alcohólicas. No pueden entrar con armas blancas de cuchilla o tubos ni armas de fuego. También, dentro del grupo de 688 agentes, habrá un gran número sin uniformes porque son unidades que se dedican a la detección de armas y drogas”, mencionó Cordero, quien fue enfático en que se grabará toda la festividad. El Alcalde aseguró que estas restricciones se han llevado a cabo en las últimas tres ediciones de las Fiestas. “De hecho, hace dos o tres fiestas, aquel muchacho que tuvo un rato de diversión a través del codo, y le dio con treparse en el Tótem y lo rompió, fue captado por las cámaras y arrestado. Pienso que aquel que quiere sentirse seguro, si tiene mejor iluminación, policías cerca y cámaras, debe sentirse en el paraíso”, manifestó Santini, quien tomó estas medidas, a pesar de que comunicó que en “los últimos 10 años no ha habido incidentes que lamentar”.

El Ejecutivo Municipal repitió que la venta en los establecimientos y kioscos culminará el jueves, a la medianoche, el viernes y sábado, a la 1:00 de la madrugada, y el domingo a la medianoche, como detalló en una ordenanza municipal. “El horario es final y firme”, dijo en referencia a la petición de los comerciantes de tener sus puertas abiertas el viernes y sábado hasta las 2:00 de la madrugada.

El Ayuntamiento de Sestao ha comenzado a instalar tres cámaras de seguridad en el parque El Sol y a finales de mes colocará otras tres en la calle Carranza para mejorar la seguridad de la parte baja de este municipio vizcaíno. La colocación de estas cámaras, según han informado a Efe fuentes del Ayuntamiento, responde a un acuerdo plenario de 2008 en el que todos los grupos municipales aprobaron la instalación de cámaras de seguridad en varios puntos de la localidad. El Ayuntamiento tiene ya cinco cámaras de seguridad en la calle la Iberia y en las rampas mecánicas de la calle Antonio de Trueba y dos en la calle Los Baños. Además, el consistorio tiene previsto instalar cámaras en la calle Txabarri una vez que concluyan las obras de urbanización que se están llevando a cabo y que está previsto finalicen en septiembre.
FUENTE: www.adn.es

El alcalde de Navia, Ignacio García Palacios, aseguró ayer que el número de denuncias relacionadas con actos vandálicos en la capital del concejo ha descendido. Según los datos del gobieno local, que desde el inicio de la oleada de destrozos ha mantenido un contacto permanente con las fuerzas de seguridad, en los últimos fines de semana «no ha ocurrido nada excepcional» que alarmara a vecinos y empresarios, como sucedió en noviembre y en diciembre, cuando se constató un incremento de las denuncias de particulares por destrozos en mobiliario público y privado, por amenazas, por ruidos y por «botellón». 

García Palacios indicó que el incremento de los actos delictivos de los pasados meses podría ser excepcional y lanzó un mensaje de tranquilidad a los empresarios del comercio y del sector hotelero y a los vecinos, que en las últimas semanas advertían de continuos problemas ocasionados por grupos de jóvenes. De hecho, el gobierno local ha retrasado las medidas de seguridad que hizo públicas el pasado diciembre y que incluían la instalación de cámaras de vigilancia en las zonas más conflictivas. Este nuevo instrumento para controlar el vandalismo en Navia, en principio aplaudido por los comerciantes y por los vecinos, no tiene ahora fecha de puesta en funcionamiento. Aunque el Alcalde explica que «se está estudiando» el tipo de dispositivos que se instalarán, evita dar fechas, incluso a largo plazo. 

Los comerciantes, principales afectados por los destrozos, no son los únicos que han apoyado esta medida, sino que también la ha demandado el vecindario de las calles Las Armas y San Francisco, donde se concentran el «botellón» y las reuniones de los jóvenes que presuntamente cometen los destrozos. 

Poco o nada. Eso es lo que se pudo obtener de los registros de las comunicaciones que se produjeron en la madrugada del 8 de diciembre de 2010, justo en las horas previas a que se desencadenara el fatal incendio que costó la vida a 81 reos.

Se esperaba que las grabaciones pudieran complementar los registros escritos recogidos como evidencia por la policía días después del incendio. Entre las especies había 17 estoques, bolsas de documentos, y cajas de cartón en cuyo interior se trasladaron 7 libros de novedades de la guardia armada del lugar, 5 libros de novedades de la guardia interna y 3 de atención de enfermería.

Según el subteniente de Gendarmería, José Hormazábal, jefe de servicio nocturno esa madrugada, "siendo las 5:45 horas recibí un llamado radial de parte del centinela del puesto tres, quien señala que en cuarto piso, sector sur de la torre 5, los internos habitantes mantenían una riña generalizada por lo tanto, yo y los funcionarios a mi cargo concurrimos al lugar para corroborar esta información".

Al ingresar a la cruceta 5, dijo, "me percaté que había un incendio cuyo foco era el cuarto piso sur (...) tomamos cuatro extintores de la torre y subimos al cuarto piso. Recuerdo que arrojamos el contenido del extintor al foco de las llamas, sin obtener resultados positivos".

Contactos radiales ininteligibles

No obstante, los registros de los contactos radiales entre los gendarmes (incluido aquel que menciona el subteniente Hormazábal) son prácticamente ininteligibles...

Una que otra frase entrecortada que permite establecer que el primero en avisar a sus superiores es efectivamente un vigilante de las torretas. El mismo que pocas horas antes había ido al casino institucional de Vicuña Mackenna y se había tomado una cerveza y un ron con Coca-Cola.

La subdelegación del Gobierno en Burgos apuesta por incrementar la presencia policial en las zonas de ocio de la ciudad, medida a la que podría sumarse la instalación de cámaras de vigilancia a propuesta del Ayuntamiento de la ciudad. Ambos temas que se tratarán en la próxima Junta de Seguridad Local tras los últimos sucesos que se han saldado con heridos y varis víctimas mortales

El último de ellos se produjo el pasado domingo, cuando cuatro personas de entre 25 y 47 años resultaron heridas, tres de ellas por arma blanca, en una pelea ocurrida en una céntrica calle de la ciudad. Tres de ellos, entre los cuales se encontraba una mujer, fueron dados de alta «in situ» y sólo uno fue ingresado en el Hospital General Yagüe donde, por otra parte, continúa ingresado en estado grave el joven de 18 años que fue agredido en una zona de bares el último fin de semana del 2010.

Tras estos hechos, la concejala de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Burgos, Gemma Conde, anunció ayer que este mismo mes de enero se convocará la reunión de la Junta de Seguridad Local en la que, con la subdelegación del gobierno y los representantes de los distintos cuerpos y fuerzas de seguridad, se buscarán soluciones.

En todo caso, la subdelegada del Gobierno, Berta Tricio, ya ha pedido al comisario Jefe que revise el Plan de Presencia Policial en las zonas de ocio nocturno y apuesta por incrementar el número de efectivos ya que, en su opinión, «siempre es más disuasorio que una cámara para las personas que están bebidas o bajo los efectos de distintas sustancias que no recuerdan si les vigilan o no una cámara». En este sentido, la concejala Gemma Conde reconoce que «no es la panacea», pero su instalación sería «positiva» porque, como se ha demostrado en otras ciudades, «contribuyen a la eficacia policial». Además se trata de una medida solicitada en reiteradas ocasiones por distintos colectivos ciudadanos.

Tricio destaca precisamente la efectividad policial como uno de los «mejores elementos disuasorios» haciendo saber a los jóvenes que los participantes en las últimas agresiones ocurridas en Burgos están detenidos por lo que deben tener claro que «sus actuaciones tienen consecuencias». Además, la subdelegada del Gobierno insiste en que las estadísticas demuestran que «Burgos es una ciudad segura»

 

FUENTE: www.abc.es