La investigación del Ejército de Tierra sobre el robo de armas en elcuartel de Botoa (Badajoz) concluye que no fallaron las cámaras de seguridad y que cuatro de ellas registraron imágenes de movimientos sospechosos que no fueron atendidos por los miembros del servicio de seguridad.

Fuentes militares responden así a las acusaciones de la portavoz de Defensa del PP en el Congreso, Beatriz Rodríguez-Salmones, quien en el pleno del Congreso ha dicho que el día del robo de armas en el cuartel extremeño fallaron las cámaras de seguridad y ha pedido a la ministra de Defensa "todos" los informes internos.

Tras mostrar su sorpresa por la denuncia del PP, las citadas fuentes han señalado que la investigación interna llevada a cabo por el Ejército de Tierra establece que las cámaras del perímetro de seguridad de la base militar funcionaron correctamente.

Un buen número de estas cámaras se activan cuando se detecta algún movimiento y de hecho se activaron esa misma noche. El informe recoge que en el punto del perímetro de la base por donde entraron los ladronescuatro cámaras grabaron imágenes de movimientos sospechosos.

Las imágenes captadas confirman que algunos de los miembros de la patrulla de guardia tuvieron un comportamiento negligente, ya que demuestran que no realizaron las inspecciones y controles ordenados. Por ello, según las fuentes militares, las sanciones impuestas están plenamente justificadas y se basan en hechos contrastados y objetivos.

Según ha denunciado la diputada del PP a la ministra, "los informes son demoledores: 29 de 44 cámaras funcionaron mal. No diga que la seguridad de la base depende de cuatro personas".

El robo de 20 fusiles HK y diez pistolas se produjo la noche del 27 al 28 de marzo. Cuatro de los militares que estaban de guardia fueron arrestados.

FUENTE: www.elmundo.es