La Audiencia Nacional tiene dudas en el llamado «caso Google». Por eso se plantea formular una cuestión prejudicial ante el Tribunal de Justicia de Luxemburgo antes de resolver por sentencia si el buscador debe borrar los datos de cinco particulares que fueron subidos a internet sin su previo consentimiento. La Sección Primera de lo Contencioso-Administrativo dictó ayer una providencia en la que, como prescribe la ley, da traslado a las partes personadas en la causa —Google y la Agencia de Protección de Datos— para que informen sobre la conveniencia o no de que la Sala se dirija al Tribunal europeo.

El debate que se plantea es si en internet debe prevalecer el «derecho al olvido» o la «pena de buscador». Es decir, si cabe la posibilidad de que los datos de los particulares desaparezcan de la red definitivamente o, por el contrario, pueden permanecer colgados aún en contra del deseo de sus propietarios. El asunto ha llegado a los tribunales de la mano de Google, que ha recurrido varias resoluciones de la Agencia de Protección de Datos que le obligan a borrar la información que figura en el servidor sobre los cinco citados particulares.

En la providencia, la Sala pone de manifiesto sus dudas sobre la interpretación que debe hacerse del Derecho Comunitario, dudas que llevan a los magistrados a considerar la necesidad de formular la cuestión prejudicial ante el Tribunal de Luxemburgo. Además, se recuerda que la decisión que la Audiencia Nacional adopte en este contencioso afectará no sólo al contenido de internet en España, sino también en los países europeos.

 

FUENTE: www.abc.es